Actividad que se enfoca en convertir en hábito una correcta comunicación, mostrando una actitud integradora, atención y vocación de servicio, con todos nuestros interlocutores más allá de nuestra posición jerárquica. Conocer, controlar y gestionar desde la inteligencia emocional las situaciones de tensión, conforme a los protocolos de normal convivencia y nuestros valores.