Entre las medidas de impulso de la innovación y la calidad en FP, el CIFPA promueve el desarrollo de proyectos de innovación, tanto en el ámbito estatal como en el autonómico, basados en la colaboración entre centros de Formación Profesional, empresas y Administraciones públicas.
La participación de los centros de Formación Profesional en proyectos de investigación, innovación y experimentación contribuye directamente al desarrollo económico sostenible y al bienestar social. No se debe olvidar que en la Formación Profesional tienen cabida numerosos tipos de innovación jugando un papel muy importante para las pequeñas y medianas empresas de nuestro tejido empresarial porque lo que es innovación en un contexto puede ser una práctica habitual en otra y, ello, juega un papel fundamental la transferencia del conocimiento.
Los centros de FP tienen la responsabilidad de fomentar la realización de proyectos en sus aulas que potencien el desarrollo y la mejora de los procesos tecnológicos, metodológicos y formativos y potencien la colaboración con el mundo empresarial. Estos proyectos deberán evolucionar hacia sistemas de trabajo que integren la innovación didáctica y tecnológica en las enseñanzas de Formación Profesional y pongan en contacto permanente a centros educativos con el tejido empresarial de su entorno, así como, como con organizaciones y entidades con el mismo interés científico dentro de una cultura colaborativa. Teniendo en cuenta que las pequeñas y medianas empresas (PYMEs) son el principal motor del crecimiento económico y de la creación de empleo en nuestro país y generan dos tercios del empleo en Europa, para mejorar la competitividad de las PYMEs se necesitan trabajadores cualificados y especializados y el desafío de la FP es ofrecer una formación cada vez más investigadora, creativa e innovadora que contribuya a tal fin.